Jugamos?

Si querés sentáte, pues si, sentáte acá al frente, es que al lado no te puedo ver bien y yo necesito ver cuando me hablan, vos sabés como soy yo con esas cosas, no loca no, digamos que simplemente me gusta ver cuando me hablan, si vos sabés, vení sentáte y contáme que fué, cómo paso, pero contáme bien las cosas y no te pongás a llorar, que entre lloriqueos y mocos no escucho y mucho menos te entiendo, empeza pues, contáme que te tiene así, aunque me imagino que más que un que es un quien, pero dale contáme, cómo que está saliendo con otra? Cómo que no te había contado nada? Cómo que te la presento como una amiga? Y qué esperabas? Qué te llamara? Qué te pidiera permiso? Qué salieran los tres juntos a cine o qué? No pues si querés llamala y le contás como le gusta a él que le hagas las pastas y le contás como le gusta que le den besitos y le contás todo y salen a comprar ropa juntas y se la prestan despúes? No, no me digas irónica, simplemente estoy siendo cruda, no irónica, ¡Agh, y no me vengás a decir que no te importa lo que él haga, que si no te importará no estarías contandome todo esto, ni llorando estarías! Ah yo sé que te da rabia, pero que esperabas, así estaban jugando y así eran las reglas del juego de ustedes, desde el principio las tenían claras, vos querías cambiarlas pero nunca te ateviste a decirselo y él siguió jugando, sólo que ya cambio de bando, no te preocupes que seguramente la otra semana ya ni te acordás de lo enamorada que decís estar de él y muy seguramente ya tengás un nuevo miembro en tu equipo y ya hallas hecho muchas anotaciones, o goles, o cestas, o puntos, no sé, todos los deportes no son iguales? Dejá, no te agobies por eso, él es sólo un hombre, un simple hombre de tantos que han pasado por tu vida y de tantos que van a pasar, y seguramente la otra semana ya lo vas a olvidar, dejá, limpiáte, no mas lloriqueos y vamónos a jugar!